Es posible que el termino te parezca totalmente desconocido, sin embargo, una dispensa no se refiere a otra cosa más que a la reducción de rentas que otorga el arrendador, al arrendatario, en los pagos por el alquiler de un activo.
Las dispensas en los arrendamientos surgieron a partir de la pandemia por el COVID-19, en donde diversos activos no están siendo utilizados como se tenia planeado. De ahí que los arrendatarios buscaron obtener dispensas por parte de los arrendadores.
Existen tres tipos de dispensas en los arrendamientos. La primera solo es la condonación parcial de los pagos, la segunda se refiere a un diferimiento de pagos y la tercera a una combinación de las dos primeras.
Si bien es cierto, la Norma de Información Financiera (NIF) D-5 Arredramientos, entró en vigor a partir del 1° de enero del 2019, con bastantes cambios, por mencionar algunos tenemos que el arrendatario ahora debe reconocer los activos y pasivos de sus arrendamientos mayores a doce meses y se requiere, reconozca un activo por derecho de uso y un pasivo por arrendamiento. Adicionalmente, hoy en día los involucrados se enfrentan a las dispensas.
La aplicación de las dispensas en los contratos de arrendamientos entró en vigor a partir de 1° de junio del 2020 y hasta el 30 de junio del 2021 de acuerdo con la información emitida por el Consejo Mexicano de Normas de Información Financiera (CINIF).
No obstante, en convergencia con la normatividad internacional y considerando que la pandemia del COVID-19 aún se encuentra presente, es posible que las dispensas tengan un año más de plazo, extendiendo este criterio hasta la primera mitad del 2022.
En consecuencia, ¿Cuál es el tratamiento correcto que se le deben dar a las dispensas? Las dispensas en sí, no generan la necesidad de modificar el contrato. Ahora bien, si existe una modificación en el valor del pasivo por arrendamiento, ¿Cómo debería considerarse dicho efecto? Bueno, siendo ese el caso, los efectos que se generan deben ir directamente a resultados. En complemento, la remedición del pasivo por arrendamiento se debe hacer aplicando una tasa de descuento modificada, Además, el cambio en el valor del pasivo se relaciona directamente con una modificación al valor del pasivo por derecho de uso.
Al mismo tiempo, es importante saber determinar el importe de la dispensa conforme a norma, esto se realiza, llevando a valor presente el valor del pasivo antes y después de la condonación. Teniendo claro que la ganancia por la reducción parcial del pasivo se va a reconocer en los resultados de operación, el efecto por el valor del dinero en el tiempo por el diferimiento de pagos, podría pasar al resultado integral de financiamiento.
Es de suma importancia tener la suficiente cautela al momento de emplear la normatividad aplicable en materia. En un entorno cada vez más competitivo, la correcta presentación de información te permite estar a un nivel transnacional.
Si te encuentras realizando actividades de arrendamiento o tienes relación con alguna entidad que esté realizando dicha actividad, Grupo GSG Mefintax mediante su división de Normatividad Financiera, se encuentra a sus órdenes en caso de que requiera mayor información sobre el tema o para asistirle en asesoría especializada.